Jamás en la historia moderna de la humanidad habíamos atravesado por una pandemia como la impuesta por la COVID-19 y con toda certeza podemos decir que estamos ante un antes y un después de ella. Hoy debes tener en cuenta algo sencillo: correr después de la pandemia ya no será lo mismo.
Correr después de un parón tan prolongado amerita hacerlo correctamente y con mucho esmero, pero también con los suficientes cuidados para retomar tus entrenamientos habituales sin exponerte a una lesión. No pierdas de vista que debes darle a tu cuerpo el tiempo necesario para acostumbrarse de nuevo al esfuerzo, ritmo y velocidad que tenías antes de la pausa obligada.
Debes tomar en cuenta que aunque estuviste manteniéndote activo haciendo ejercicios indoor y quizás haciendo algunos kilómetros en corredora fija, nunca será lo mismo correr en exteriores. Así que pon atención.
La mejor manera para volver sin riesgo
La palabra clave si eres un corredor experimentado o aficionado es la misma: precaución. Por eso, te sugerimos algunas de las medidas precautorias que debes de tomar en cuenta para eliminar cualquier probabilidad de lastimar tu cuerpo.
¡No todo es el tren interior!
Quizás la palabra Core no te diga demasiado, pero se trata de la zona que comprende los músculos abdominales, oblicuos, de columna, lumbar, flexores y extensores pélvicos y glúteos. Es importante que ejercites esta zona porque es el centro de gravedad de tu cuerpo y te proporciona la mayoría de la fuerza y estabilidad que necesitas.
Punto extra: Mentalízate
El poder de la mente es innegable, pero si no la controlas y guías hacia una correcta preparación paulatina para hasta llegar a tu 100%, las consecuencias pueden llegar a ser dolorosas. Piensa que por ahora menos es más, y que es necesario que ir con tranquilidad... nada de precipitaciones, es tu salud la que pones en juego.