El ciclismo es un deporte bastante completo, el agente más perfecto del desarrollo muscular. Es un ejercicio de fuerza, un ejercicio suave, un ejercicio de velocidad o de fondo, siempre de equilibrio y agilidad.
La bicicleta es un aparato de equilibrio gimnástico muy perfecto, excelente para el desarrollo normal del cuerpo. Es al mismo tiempo un aparato de progresión con una fatiga extremadamente mínima, lo que hace que sea sugestivo y agradable y explica que sea un deporte de moda.
Se puede decir que la casi totalidad de los músculos del cuerpo están en acción en la bicicleta, tanto los músculos de los brazos y del tronco como los de las piernas. Como estos últimos suministran la mayor parte del trabajo se desarrollan bastante, pero no es menos cierto que los brazos, los antebrazos y las espaldas adquieren también proporcionalmente un buen desarrollo (en las carreteras accidentadas, el trabajo de las espaldas y de los brazos es más considerable, porque para escalar las cuestas el punto de apoyo sobre el manubrio es máximo).
La aparición de la bicicleta, con neumáticos, dio al ciclismo una popularidad universal no sólo como pasatiempo o deporte, sino como un conveniente medio de locomoción.
Cuando en 1791 el francés, DE SIVRAC, construye un vehículo de dos ruedas, dándole el nombre de “Celeférico“, tenía probablemente una sola ambición, ofrecer un motivo más para divertirse. Fue construido en madera y consistía en dos ruedas de un diámetro de cerca de 70 centímetros, unidas a un armazón sobre el cual venía colocado un asiento. El vehículo no llevaba ninguna dirección articulada, lo que obligaba al conductor a parar cada vez que quería cambiar el sentido de la marcha, a pesar de que el vehículo se accionaba por la impulsión alternativa de los pies que se apoyaban sobre el suelo.
El barón KarI-Friedrich Christian Ludwig Von Drais, nacido en Karlsruhe, BADEN (Alemania), presenta en París un nuevo “Celeférico“ que a la época ya habían adoptado el nombre de velociferos. El 5 de Abril de 1818, en el Jardín Luxemburgo, el nuevo velocífero perfeccionado causaría la admiración y el entusiasmo de los asistentes. La nueva “Draisiana“, nombre con el que se la dotaría en honor a su inventor, poseía un sistema de dirección móvil, que facilitaría el cambio de dirección sobre la marcha, sin necesidad de efectuar parada alguna. Con esta máquina se realizaría todo un récord, cubriéndose la distancia que separaba BEAUNE de DIJON a la velocidad promedio de 15 kilómetros hora.
Las competiciones ciclistas tienen en 1868 su año de origen; a partir de entonces las gestas del deporte ciclista se han venido sucediendo ininterrumpidamente. Los grandes campeones han prestigiado este deporte hasta hacerle rico en hazañas increíbles y en curiosas anécdotas.
La competición, que será la primera de la historia, tiene lugar en el Parque de Sint Cloud, de París, el día 31 de mayo de 1868. El recorrido, establecido en las avenidas del parque, se fijó en 1.200 metros, siendo el vencedor el inglés James Moore. La gran expectación que levantaron las competiciones quedó patente con motivo de la prueba en ruta París-Rouen. que se celebró el 7 de noviembre de 1869 y que reunió en la salida a 200 participantes, de los 323 inscritos.
La bicicleta, no se creó de un solo golpe. Al genial invento de la dirección móvil, creado por Von Drais en 1818, siguió el no menos importante de los pedales, ideado por Michaux en 1861. En 1868, un modesto relojero parisino, llamado Guilmet, ideó una bicicleta de dos ruedas diametralmente parecidas, un poco mayor la delantera, siendo la trasera la rueda motriz que se accionaba por transmisión de cadena.
No obstante, el más remarcable progreso para el ciclismo lo lleva a efecto el veterinario irlandés J. Dunlop en 1888, cuando sustituye en las ruedas de la máquina de su hijo las bandas de caucho macizo por el neumático hinchable, el cual permitía ser hinchado por una válvula y facilitaba un rodaje más cómodo y ligero con un menor esfuerzo en el pedaleo.
En 1893 se celebran, por primera vez, los campeonatos mundiales de velocidad y medio fondo para la categoría de aficionados y se establece el primer récord de la hora, oficialmente, homologada. Y en 1896 tienen lugar los primeros Juegos Olímpicos de la era moderna, en los que la mayoría de las pruebas ciclistas que se celebran son de pista.
El ciclismo se une internacionalmente bajo un mismo organismo directivo: la Unión Ciclista Internacional (U.C.I.), que se funda en París el día 14 de abril de 1900.